Articulaciones tradicionales japonesas y su libro de cabecera

El otro día alguien me sugería, en relación con carpintería tradicional japonesaque retomara el tema y lo desarrollara, ya que es muy interesante. Como hacía tiempo que quería hacerlo, me pareció muy bien la recomendación, así que me puse manos a la obra. La carpintería tradicional japonesa me parece fascinante y creo que podría leer durante horas, sin cansarme, para averiguar todo lo que pudiera. De hecho, eso es más o menos lo que me está pasando últimamente. Así que voy a hablarles un poco más de la carpintería tradicional japonesa, pero también de la pasión con que se conserva a pesar de todas las técnicas modernas que se utilizan ahora en la construcción y la fabricación de muebles.

Con los modernos medios de documentación, no es nada difícil encontrar ejemplos de este tipo de uniones. Encontrarás descripciones, fotos, películas y gifs que te mostrarán lo que hace falta para conseguir la unión perfecta.

Lo que es más difícil es descubrir las historias entre esta información. Y por suerte encontré una de ellas que, aunque no es extraordinaria, sin duda demuestra el deseo de los japoneses de no perder su herencia cultural y sus tradiciones.

En 1989 se publicó en Japón un libro técnico en el que se describen detalladamente las uniones tradicionales realizadas sin utilizar ningún otro material auxiliar, con croquis, vistas superior, frontal y lateral, dimensiones y fotografías. Básicamente, la unión se realiza dando a cada pieza una forma particular. Unidas, las piezas encajan perfectamente sin tornillos, clavos, pegamento ni otros materiales similares.

Se describen dos tipos de articulaciones: desmontables y no desmontables. A primera vista se podría pensar que no hay muchas variantes para cada uno de estos tipos, pero no es del todo así. En el libro hay 9 articulaciones desmontables y 13 no desmontables, y para muchas de ellas hay hasta 5 variantes. Tienen nombres exóticos como Kanawa Tsugi, Mechiire o Dodai Shiguchi y algunas de ellas son realmente complejas.

Es increíble cómo podían imaginar cómo sería la unión. Ahora, cuando se pueden hacer programas informáticos para todo tipo de cortes y uniones, y hacerlos con CNC, sigue siendo difícil imaginar una construcción hecha enteramente de uniones sin ninguna ayuda. Antes, todo se hacía a mano, con herramientas clásicas, y el resultado era perfecto y duraba siglos. Y todo se diseñaba de tal forma que la fibra de la madera no tuviera que sufrir para no afectar a la resistencia de la unión.

Lo que me hizo hablar del libro fue, quizá más que lo que encierra, la historia de su aparición. El libro tiene dos autores, Torashichi Sumiyoshi y Gengo Matsui. El primero es un carpintero oficial nacido en 1911, que aprendió la carpintería tradicional japonesa en las castas que transmiten el arte de trabajar la madera de generación en generación. Desde 1924 trabaja la madera con su propia empresa y forma parte de organizaciones que construyen y restauran templos.

El segundo es un reputado profesor de la Universidad de Waseda. El Sr. Matsui se licenció como arquitecto en la universidad en 1943 y regresó a ella como profesor tras doctorarse en 1960. Ambos se conocieron en 1985, cuando trabajaron juntos en el diseño y la construcción del instituto Eishin Gakuen Higashino, junto con el arquitecto inglés Christofer Alexander. Eishin Gakuen es famoso por su estructura de madera, especialmente porque se construyó tras un largo periodo en el que no se habían construido edificios de este tipo.

Matsui quedó impresionado por el arte de Sumiyoshi en el ensamblaje, por su forma sencilla de trabajar. Era una forma de trabajar de la que no había aprendido nada en la escuela. Pero aquellas sencillas uniones eran tan sólidas y estaban hechas de forma tan correcta y precisa como si fueran obra de un científico. Decidió que este conocimiento no debía perderse, que era un tesoro y que los constructores, ingenieros y arquitectos debían poder estudiarlo en la escuela. Así nació el libro, en el que los bocetos fueron realizados por estudiantes de la Universidad de Waseda siguiendo las precisas instrucciones del carpintero.

Como ya he dicho, el libro se publicó en 1989, y en 1990 ya había salido la segunda edición. La versión en inglés no se hizo esperar y ya estaba disponible en 1991. Desde entonces, este libro ha sido el favorito de muchos artesanos de todo el mundo, y se imprimen nuevas ediciones. Puede encontrar aquí la versión de primera edición que, estoy seguro, los aficionados considerarán un verdadero tesoro.